domingo, 7 de agosto de 2016

Columna emitida del 30/06 al 02 07/2016


UNIVERSIDAD Y CALIDAD


Ningún gobierno puede conducirse con los arrebatos de una minoría anárquica
Hace unos días se dio a conocer, el ranking de las 50 mejores Universidades latinoamericanas donde nuestro país ocupó el segundo lugar, con 11 Universidades dentro del total, que abarcó desde México al sur.

El ranking, publicado por el centro inglés Times Higher Education se desarrolló adaptando el ranking mundial, de manera de destacar las diferencias de nuestro subcontinente, y abarcó 13 factores evaluados de manera de tener una metodología objetiva para elaborar esta publicación.

De  esta manera, indicadores como investigación, publicaciones, proporción entre alumnos y personal, grado académico de sus docentes, citación internacional de publicaciones propias, patentes industriales, y otra serie de factores, permitieron determinar la calidad de los centros universitarios.

Jubilaciones millonarias y fugas en el SENAME, hicieron que una noticia de tan fuerte impacto, no tuviera la resonancia debida en un país donde hace más de una década seguimos discutiendo sobre calidad, universalidad y estatismo en nuestro sistema de educación superior.

Estos resultados, contradicen dramáticamente el discurso oficial del gobierno, en el sentido de la urgencia de reformar el sistema universitario y la perorata a que nos tiene acostumbrada la dirigencia estudiantil, que exige cambios pero no saben a dónde, ni cómo, ni menos por qué.

Nosotros, lo simples ciudadanos que debemos financiar con nuestros impuestos y la postergación de otras prioridades sociales, los berrinches estudiantiles y la ineptitud de la clase política, debemos informarnos al menos de lo siguiente:

  • 23 de las mejores 50 universidades de Latinoamérica son brasileñas, es decir, casi un 50%, lo cual parece corresponder al tamaño y riqueza de este país,
  • 11 de las mejores 50 universidades de Latinoamérica son chilenas, lo que corresponde a un 25% del total, lo que supera con creces la importancia y tamaño relativo de nuestro país en el subcontinente,
  • Finalmente, de las 11 universidades chilenas que aparecen en este ranking, 7 son privadas, así como escucha, privadas, y solo 4 estatales
Cuando apoyamos el cambio del modelo universitario en Chile nos estamos refiriendo a aquellos factores del sistema, que son un obstáculo para su crecimiento y desarrollo.

Por eso, no es necesario refundar un modelo, refundar la sociedad, refundar la patria que es a lo que nos quieren llevar o por lo menos, hacernos creer que hace falta.

Y las explicaciones están por el lado de los promotores de este cambio, traducido en un proyecto de ley que no conforma a nadie, ni siquiera a sus partidarios.

¿Porqué debemos cambiar radicalmente algo que ha vista del mundo sí está funcionando? Porqué la calidad en la Universidad Federico Santa María, Diego Portales, Austral de Chile, Católica y hasta en la Universidad del Desarrollo ,al parecer sí existe.

La pregunta es: ¿porqué en la Universidad de Tarapacá o la Universidad Arturo Prat no existen elementos de calidad que sean reconocidos por sus pares?
Porque les contaré que en este ranking no aparecen ni en las tapas dichas universidades, cosa que por lo demás, ya sabíamos al constatar la calidad de sus directivos.

Un verdadero sentido reformador de un mal sistema debe ser oportuno, en este caso, también financiable, y por sobre todo, debe ser construido sobre las bases en que se ha desarrollado y ganado prestigio.

Yo quisiera que con los mismos recursos, la misma preocupación y la misma prioridad con que se trata a la Universidad de Chile se tratase a la Universidad de Tarapacá, sin que ello menoscabe ni la oportunidad, ni las diferencias naturales de las Universidades privadas, que día a día demuestran su aporte.

Esto que es políticamente incorrecto es socialmente necesario.

Existen otros factores que son comunes en el éxito de estas 50 universidades: la alta inversión en investigación y desarrollo, un alto aporte estatal en relación al PIB, y una selección rigurosa y de alto estándar de sus estudiantes.

Claro, porque la única receta para el éxito sigue siendo un 90% de transpiración y un 10% de inspiración.   Yo agregaría, al menos 1% de un buen gobierno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario